Tras la verdad, la perversidad de AMLO y sus grupos parlamentarios
Los grupos parlamentarios de Morena, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, abrogaron la Ley Orgánica de la Lotería Nacional
Jueves 30 de enero de 2020
Los grupos parlamentarios de Morena, tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, abrogaron la Ley Orgánica de la Lotería Nacional, de tal suerte que esa institución dejó de existir jurídicamente. De ahí la perversidad del Presidente de la República, quien hace creer a millones de incautos, que rifará el avión presidencial y mandarán imprimir 6 millones de “cachitos”, para que el gobierno de la 4T, se haga de cientos de millones de pesos. El engaño crece. El avión no es propiedad del gobierno federal, está en arrendamiento, con opción a compra; pero no es propiedad de Andrés Manuel López Obrador. Manipula a los ingenuos y posibles compradores de los “cachitos”, con el “garlito” de utilizar el dinero de la rifa, en la compra de insumos para los hospitales, cuando que el mismo López Obrador, se comprometió a brindar un servicio de salud al igual que países del primer mundo ¿Con rifas? Presidente, con rifas no se mejora el sistema de salud ¡Por favor!
Como no podía “rifar” un objeto por medio de la Lotería Nacional, se fueron por la vía acostumbrada, modificar o abrogar la ley que sea necesaria desaparecer, así lo han hecho para adecuar la norma a los intereses del Presidente, para que pueda cumplir sus caprichos, como fue el cado de Taibo II, reformaron la ley para que pudiera entrar a trabajar ¡Inconcebible! Ahora el capricho del Presidente es la “rifa”, a como dé lugar, del bien que no es propiedad del gobierno; en su caso, de llegar a concretarse el capricho de López, tendrán que pagar a la empresa Boeing, algunos cientos de millones de pesos; así que, los millones que ofrece aplicar en insumos hospitalarios, se verán reduciddos. Bueno, así es la mitomanía presidencial, recordemos que el producto de la venta del avión, cuando dijo que lo enajenaría, nadie lo quiso comprar, entonces ofreció que utilizaría ese dinero para otras cosas diferentes al sector salud; López no cumplió; ahora que tiene el enorme problema de la falta de medicamentos en el rubro de la salud pública, problema generado por el mismo López Obrador, le surgió la idea de destinar el dinero a la salud, ya no a lo que antes ofreció. El populismo no tiene límites.
Bien sabe el Presidente que, por medio de la Lotería Nacional no puede rifar el avión, dado que ya no existe; mas, continúa sosteniendo la idea (como es para beneficio de la asistencia pública, así rezaba el slogan de la desaparecida institución) de la rifa, tal cual si tuviera vida jurídica la Lotería Nacional, que fuera abrogada el pasado 14 de enero, según se lee en la publicación del Diario Oficial de la Federación, de la fecha en comento. Así que la operación la tendrá que realizar Pronósticos para la Asistencia Pública, asunto resuelto para Andrés Manuel. El capricho se cumple. Sigue pendiente lo que decidirá la empresa Boeing, si por medio de contrato (por escrito) autoriza la rifa de la aeronave y con el producto de la misma, se pague lo que se adeuda a la empresa, se compre la nave y, hasta entonces, se pueda transferir la propiedad del bien mueble. Tendría que ser un contrato que prevea un sin número de posibilidades, tales como la no venta suficiente de boletos y no alcance para pagar la nave, pero haya un ganador; o, que el Presidente, como acostumbra, ya con el dinero en mano, no quiera pagar a la empresa, lo hizo con el aeropuerto de Texcoco, que no lo haga con la empresa Boeing. La facturación está pendiente. Por si lo anterior no fuese suficiente, pretende López Obrador, imponer obligaciones al posible ganador de la rifa, ello no está permitido legalmente.
Ahora bien, para Andrés Manuel López, no hay imposibles. El Presidente se ha vuelto promotor de una rifa, lo que no está en sus atribuciones (una vez más, no respeta la ley), tampoco lo permite Pronósticos para la Asistencia Pública; ésta, la promotoría de publicidad, está a cargo de la institución responsable. López Obrador, lucra con la Presidencia de la República y utiliza todos los medios del poder público a su alcance para la consecución de sus ocurrencias. Como distractor ha resultado formidable el asunto ilegal de la rifa. Por lo pronto es mucho más importante para el Presidente el distractor, así los medios de comunicación y la sociedad en su conjunto, atienden la ilegalidad de la rifa del avión que no es del gobierno, antes que atender prioritariamente los delicados y serios problemas como la inseguridad, el desbordamiento de inmigrantes que buscan internarse a nuestro país para intentar llegar a los EUA o quedarse en territorio mexicano, incluso la desatención mediática respecto de la suspensión provisional otorgada por un juez de distrito, quien ordenó suspender los trabajos de otro de los caprichos presidenciales: su tren Maya. A virtud del juicio que han promovido comunidades originarias de la zona la obra se detiene; ya vendrán las presiones de López y su séquito de “gorilas”, que obligan a los jueces a cambiar de opinión, como sucedió con las obras de Santa Lucía. Temas importantísimos que, por lo pronto, quedaron al margen, para dedicar las “cuatro columnas” a la ilegal y caprichosa rifa de un avión que no se pudo vender y sí pagó la estratosférica suma de 30 millones de pesos, por haberlo tenido guardado en los hangares de la empresa en territorio de los EUA; millones de pesos que literalmente tiró a la basura el Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, Andrés Manuel López Obrador, dinero que bien pudo aplicarlo en insumos para el sector salud y no entretenerse con una rifa. Pero no, el Presidente juega con el ánimo de los mexicanos, además de que los divide, induce a millones a pensar que los compradores de “cachitos” ayudarán a en la compra de material para hospitales, cuando en realidad se trata de otra burla del Presidente de la República ¡Presidente perverso!
Héctor Parra Rodríguez