Tras la verdad: Presidente cínico y corrupto.
Esta vez le tocó a Jaime Cárdenas Gracia, renunciar y denunciar el nido de corrupción que existe en el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado.
Querétaro Qro. 23 de septiembre de 2020.
Esta vez le tocó a Jaime Cárdenas Gracia, renunciar y denunciar el nido de corrupción que existe en el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado. López Obrador, sin embargo, vuelve a minimizar lo denunciado por Cárdenas, como lo hiciera con Germán Martínez Cázares, Carlos Urzúa Macías y Víctor Manuel Toledo Manzur. Para el Presidente todo marcha bien, reina el cinismo. Respecto de Jaime, Andrés López atribuyó la renuncia (omitió lo denunciado) a razones personales del renunciante, incluso lo acusa “sutilmente” de flojo. Aquel prefirió regresar a la academia en la UNAM, donde cobra salario de tiempo completo, que solapar y ser coparticipe en la corrupción institucionalizada.
Tras la renuncia, el Presidente así descalificó a Jaime Cárdenas: «Él quiere estar más en la academia, la administración más en épocas de transformación exige mucha entrega y fatigas. Hay gente muy buena, honesta, con convicciones, inteligentes, pero no se les da lo del trabajo como servidor público. Cuando se busca una transformación, cuando se lucha por una causa justa, cuando se lleva a la práctica el amor al prójimo, eso da muchísima fortaleza, mucha fortaleza. Y nosotros aquí en el gobierno lo que buscamos es que se trabaje con convicción, que haya entrega total a la causa». No escapan de la diatriba presidencial sus “allegados”.
La renuncia poco importa en una montaña de burócratas. Lo grave es la denuncia que por escrito dejó el Doctor Cárdenas. Otra área de corrupción fue destapada, otra “cloaca” en el gobierno de la “honestidad valiente”. Jaime narra en su escrito de 5 páginas, las actividades que realizó durante los poco más de 90 días al frente del “Instituto dedicado al robo”. Dejó al descubierto la forma delincuencial en que distribuyen discrecionalmente el dinero y algunos empleados que hacen de las suyas en las subastas, “mutilan joyas valiosas, realizan contratos favorables a empresas y no al Instituto”, dijo Jaime ¡Rapaces!
De los VI apartados en que se divide el escrito de denuncia, deja en claro la discrecionalidad con que se majan miles de millones de pesos. De ahí salieron 2 mil, 807.4 millones de pesos para la entrega de premios de la Lotería Nacional, para el Insabi y SEGOB; 250 millones de pesos para premios y estímulos para personal médico; 30 millones de pesos para el Fondo de Cultura Económica (INBAL); 145 millones de pesos para la SCT, más otros 113 millones; otros 500 millones de pesos comprometidos para el Insabi; 82 millones para el Instituto Nacional de Pueblos Indígenas; donaciones de predios, etcétera. Enumera en la fracción IV asuntos jurídicos, entre ellos las denuncias presentadas ante la Fiscalía General de la República, por hechos evidentemente delictivos. La amalgama de atribuciones que maneja el “Instituto dedicado al robo” deja perplejo a cualquier experto en materia jurídica; también dejó constancia de adeudos a 4 mil, 870 trabajadores no jubilados de la desaparecida Luz y Fuerza del Centro, que ascienden a mil millones de pesos en laudos; también enajenan inmuebles. Total discrecionalidad para dilapidar a placer los bienes públicos por parte del “gabinete del sector social”, que debe ejecutar el Director del Instituto. Existen ingentes recursos en la Institución, pero no se sabe de dónde provienen, sentenció Cárdenas. Es un caos.
Analizando el contenido del documento de renuncia y denuncia del Director Jaime Cárdenas Gracia, vaya que no le faltó razón para renunciar y dejar constancia de la gravedad de los atracos que ahí suceden, antes que lo relacionen con los robos. Cárdenas también refiere que regresa a la UNAM, a partir de 1 de octubre próximo, en tanto hace la entrega legal y formal del área que dejó. Hace años tengo el agrado de conocer a Jaime Cárdenas, compañeros estudiantes en la Universidad Autónoma de Querétaro, persona honesta; no tengo la menor duda sobre los hechos de la denuncia penal que presentó ante la Fiscalía ¿Qué hará Alejandro Gertz Manero? Seguramente esperará instrucciones, dado que a él también se le relaciona con la “donación” de los 2 mil millones de pesos que se encuentran invertidos, generando intereses, en espera de conciliar ese dinero; o sea, no saben qué hacer con el dinero que entregó Gertz a López. Claro, también agradece el apoyo de la Fiscalía, para no verse en mayores problemas, no vaya siendo que López enfoque sus baterías en contra de Jaime, al desvelar la cueva de ladrones que manejan los dineros del “Instituto para robar”.
Cobarde la actitud del Presidente hacia Jaime Cárdenas, al referir con desdén que él quiere estar más en la academia, puesto que la administración pública, según López, en épocas de transformación “exige mucha entrega y fatigas”; Jaime bien pudo con esa responsabilidad y más, lo que no aguantó fue el descaro de la corrupción y manipulación caprichosa de dinero público, por parte del “gabinete social” y algunas “ratas” que se llevan todo lo que pueden ante el desorden institucional. Para estos salteadores opera aquel dicho que reza: “ladrón que roba a ladrón, tiene cieno años de perdón”.
Seguiría Andrés Manuel con la “injusta justificación” de la renuncia, al mencionar que hay “gente muy buena, honesta, con convicciones, inteligentes, pero no se les da lo del trabajo como servidor público”; en palabras llanas, indudablemente López calificó de flojo a Jaime Cárdenas, luego por eso renuncia. Presidente vil, desleal y deshonesto. Luego se auto elogiaría el mismo Presidente, al afirmar que, “cuando se busca una transformación, cuando se lucha por una causa justa, cuando se lleva a la práctica el amor al prójimo, eso da muchísima fortaleza, mucha fortaleza. Y nosotros aquí en el gobierno lo que buscamos es que se trabaje con convicción, que haya entrega total a la causa» ¡Presidente cínico y ladrón confeso!
Héctor Parra Rodríguez