Pensamientos para el éxito: Ser Bueno.

No solo debemos hacer las cosas bien, sino debemos ser buenos.

Querétaro Qro., 25 de noviembre de 2022.

Estimado lector

En el transcurso de la semana asistí a la presentación de trabajos finales de mis alumnos, escuchaba con agrado sus resultados y me encantó una frase que me permito compartirles “Cada fresa es tratada con Amor” refiriéndose a la producción de fresas para su proyecto de investigación. (Fragola, 2022) ¡Caray! si los jóvenes nos dan ejemplo de que ven el amor en sus trabajos y en su entorno ¿por qué los adultos lo olvidamos con tanta frecuencia?

Me permito comenzar esta reflexión invitándote a pensar un poco sobre la Bondad. ¿Cuándo podemos decir que una persona es buena? ¿Vale la pena ser bueno? ¿Qué beneficios tiene ser bueno? Primeramente, pensemos en la intención. Cada una de nuestras acciones surgen de una intención. ¿Qué hay dentro de los pensamientos, intenciones y emociones de los seres humanos que nos llevan a actuar de tal o cual manera?

En repetidas ocasiones hemos escuchado la siguiente frase común: “Trata a los otros como quieres que te traten a ti”. Se puede escuchar con buena intención y pensando en hacer el bien a los demás. Pero te invito a reflexionar sobre las buenas intenciones, dando el lugar a la otra persona y procurando su bien con respeto, amor y empatía. Te propongo cambiar la frase con la siguiente intención: “Trata a los otros como desean ser tratados”, en esta segunda frase el sentido cambia sobremanera; ya que será necesario entonces conocer al otro, saber ¿qué le gusta? ¿con que trato se sentirá más cómodo? Desde el simple hecho de ¿cómo le gusta que se dirijan a ellos? Entonces esta segunda frase recae en la intención de atender al otro, antes que pensar en mis propios intereses. No se trata de lo que solamente a mí me agrada cuando me relaciono con el otro; sino de mirar también sus deseos y gustos en el trato. En la medida que lo conozco puedo tratarlo como le gusta y no necesariamente como a mí me gustaría ser tratado.

Por lo tanto, podemos decir que una persona es buena, cuando tiene consideración en el otro, cuando genera empatía y toma en cuenta a los demás, cuando es capaz de entregar con generosidad su tiempo, sus recursos, sus talentos para beneficio de otros. El ser bueno genera entornos agradables al trato, donde prevalece la armonía, dónde se puede velar por el bien común, más allá de los beneficios propios. Una vez que tomamos conciencia de que nuestro paso por el mundo es para dejar huella o lo que en otras palabras podemos mencionar como” trascender”; vale la pena reflexionar ¿cómo deseo ser recordado? No solamente para recibir reconocimiento o aplausos, sino para crecer en el entorno donde me estoy relacionando. ¿A cuántas personas saludas durante el día? ¿No crees que en este tipo de pequeños actos puedes otorgar bondad?

Finalmente podemos pensar que nuestro país, nuestras familias, nuestros grupos sociales, nuestras escuelas, nuestras relaciones, necesitan personas buenas. Necesitamos generar energías positivas permitiendo que nuestra esencia humana sea plena y surja la bondad de nuestro corazón. Toda persona desearía ser tratada bien, de la misma forma que debería desear tratar bien a los demás. Sería egoísta pensar en el bien personal incluso a consta del bienestar de los demás. Ya existe suficiente maldad en el mundo para continuar sembrando actitudes negativas y cosechando resultados negativos.

Te invito a realizar pequeños actos de bondad en tu día a día, quizá alguna sonrisa con las personas que te cruzas en el camino, ceder el paso si vas en tu automóvil, ser amable en el trato con los demás, agradecer todos los gestos de bondad que tú mismo recibes, estar dispuesto a servir en pequeños actos que incluso no te generan esfuerzo y en ocasiones ni tu tiempo si ve afectado. Ser bueno es una decisión personal que implica la practica la recta intención. Implica el trato con amor. Aprovecha cada momento para que surjan tus dones y pongas al servicio de los demás tus talentos. Aprovecha cada oportunidad que te da la vida para desarrollar la bondad. La vida, el universo y la divinidad tarde o temprano te lo devolverá. De una u otra forma cada acto de bondad te será devuelto.

Recibe un gran abrazo a la distancia

Sandra Luz Hidalgo Díaz

Periódico Raíces