La fuerza y presencia de la mujer en la política, para el 21.
El principio de paridad fue incorporado en la Constitución en el año de 2014. Y fue la reforma al artículo 41 la que puso de…
Querétaro Qro. 20 de noviembre de 2020
El principio de paridad fue incorporado en la Constitución en el año de 2014.
Y fue la reforma al artículo 41 la que puso de cabeza a todos los partidos políticos, porque esta reforma llegó justo antes del proceso electoral del 2015.
En Querétaro y dentro de los partidos políticos, si bien lo habían oído hablar, no lo tomaron en serio.
Y el proceso de selección siguió en ese año, los “usos y costumbres” que todos, absolutamente todos los partidos habían practicado en lo que iba del siglo y en los últimos noventa años del sistema político posrevolucionario.
Ahora mismo, es de nuevo esa paridad total la que trae de cabeza a por lo menos quince estados, porque en esta materia, la medida – y el INE – ya tocaron nuevamente la puerta.
Y ahora viene bajo el principio de “paridad total”.
Y si es para todos los cargos electorales en disputa. ¿Porque los Ejecutivos de los estados deberán considerarse aparte? La Ley no lo especifica asi.
La paridad y desde ese año, se convirtió en un principio constitucional, con la finalidad de alcanzar una igualdad sustantiva entre los dos sexos. Y que en México se rija a la par de los compromisos internacionales adquiridos como nación en esa materia.
Si esto no es ocurrencia en solitario.
Para Querétaro y en esas elecciones del 2015, a todos los partidos y en unos cuantos días, les vino a cambiar la jugada, tanto para las 18 presidencias municipales como para el congreso local. De los gobernadores y en ese entonces, nada se dijo.
Y es que paridad es igualdad…política. Así de claro y contundente.
En virtud de esa norma constitucional, el mapa político visto desde ese ángulo, comenzó a cambiar. Por primera vez, de las 18 presidencias municipales, ocho de ellas fueron para mujeres. Y de los 25 diputados, por primera vez en toda la historia de Querétaro, 13 mujeres hacen la mayoría en ese LVIII Congreso Estatal.
En el 2018, la LIX legislatura vuelve a repetir mayoría y de las 25 curules, 13 son ocupadas por mujeres, si bien se retrocedió en el número de presidentas municipales, porque de 18, solo son actualmente seis mujeres.
A ver cómo le hacen los partidos – el IEEQ – para alcanzar esa paridad.
¿Por qué entonces no creer que la disposición del INE, basado en un precepto constitucional, no pueda decretar que la ley se cumpla en materia de paridad para las 15 gubernaturas?
Es más, el partido MORENA en donde se vive con intensidad la llamada “guerra de géneros” podría convertirse en Querétaro en el partido que proponga la mayor cantidad de mujeres a todos los cargos de elección popular, como bandera de reivindicación y reconocimiento al papel de la mujer en la política y cuyos derechos no han sido llevados aún a plenitud. A nivel nacional y en este partido, dan como un hecho que la candidatura a gobernador de Querétaro, sea para una mujer. Y esa misma intención se tiene para, al menos, otros ocho estados.
Aquí y para la Cámara de Diputados, en lo que será la LX legislatura, se anticipa que la primera fórmula plurinominal, sea ocupada por una mujer. Y lo mismo se anticipa para las regidurías plurinominales en los 18 Ayuntamientos.
La más reciente reforma constitucional – la llamada paridad total – incluye una participación total e igualitaria “de hombres y mujeres, en los ámbitos de la economía, toma de decisiones y en la vida social, deportiva, cultural y civil”, votada así el 23 de abril de 2018.
Así, esa paridad total deberá cumplirse no solo para las posiciones electorales en disputa, sino también para el gabinete de trabajo del Ejecutivo Estatal, de los equipos de primer nivel en todas y cada una de las 18 presidencias municipales, si es que queremos hablar de “paridad total”. Y se puede obligar tanto al Ejecutivo como a los y las señoras presidentas municipales, que así constituyan sus equipos de trabajo.
Los grupos feministas – se los aseguro – llevarán el reclamo de estos derechos, a todas las instancias pertinentes, desde los Institutos Electorales de los estados hasta los Tribunales Federales. Y están en todo su derecho.
¿Porque entonces, no comenzar a aceptar las propuestas para los gobiernos estatales en relación a sus Ejecutivos o Gobernadores?
Ellas, señores de los partidos políticos, no están solas. Vienen con la fuerza de la Ley debajo del brazo, pero además, con una fuerza femenina y unidad en torno al tema como nunca antes se había dado.
Y van a ganar.