Tras la verdad: AMLO no cumple.

AMLO NO CUMPLE ORDEN DE JUEZ DE REASIGNAR EL PRESUPUESTO PÚBLICO.

Lunes 20 de abril de 2020

El Juez, titular del Juzgado Segundo de Distrito en el Estado de Baja California, concedió la suspensión provisional solicitada, para que el titular del Poder Ejecutivo Federal, reoriente el presupuesto federal, a virtud de la pandemia provocada por el Covid-19; que los miles de millones de pesos que tiene programados para sus obras y jóvenes construyendo el futuro, se destinen directamente para atender todo lo relativo a la pandemia y sus efectos, entre otros evitar la pérdida de miles de empleos. Más de una semana ha transcurrido y el Presidente de la República, no se ha pronunciado, no ha cumplido. En cambio, ha dejado en claro que sus obras prioritarias no se detienen y el dinero para los jóvenes va.

Un total contrasentido con lo justificado y ordenado por el Juez de la causa. El Abogado Adolfo Cuauhtémoc Solís Farías, empeñado en ello, ha solicitado se ejecute lo ordenado en la suspensión provisional. El Poder Judicial, se encuentra semiparalizado por lo mismo de la cuarentena, a causa de la pandemia. López Obrador, ha dejado a un lado la atención de hospitales y menospreciado la pérdida de los empleos, no cambia de línea; el Juez, sin embargo, argumenta que son más importantes los derechos laborales que los del fisco, con lo cual no se afecta el interés social si se deja de pagar al fisco, en lugar de perder empleos. Por supuesto, atender la pandemia destinando recursos económicos a los hospitales para atender con eficiencia y eficacia a los enfermos. López anda mendingando dinero para atender lo prioritario, en contrario dilapida dinero público en obras que de momento no son prioritarias. El Juez ordena que se otorguen facilidades para cubrir los impuestos, pero que no se pierdan los empleos, criterio distinto al que está aplicando el Presidente, él prefiere que se cierren las empresas, se pierdan empleos, mas no se deje de pagar al fisco.  Criterios sociales, fiscales y jurídicos totalmente opuestos.

El Juez ordenó que las autoridades “tomen las medidas necesarias para la protección de las fuentes de empleo ante la crisis causada por la emergencia sanitaria global ocasionada por el virus COVID-19”; por tal motivo concedió la suspensión. Agrega que “resultan esenciales para que los trabajadores puedan subsistir, ya que con ello pueden acceder a un salario que les permitirá garantizar sus necesidades básicas, tanto en lo personal como en lo familiar, lo cual son inherentes al derecho humano a la alimentación, vivienda, salud, trabajo, entre otros”. Lo mismo que han solicitado los empresarios, pero los ha “bateado”. La suspensión es perfectamente clara, no deja lugar a dudas sobre el valor de los derechos humanos que están en juego ¿Son prioritarias las obras o los miles de empleos que se pierden? El Juez ha considerado prioritario la protección de las fuentes de empleo, consecuentemente los salarios de los trabajadores, postergando la construcción de obras que pueden continuar posteriormente. El día 11 de este mes se dictó el auto de suspensión provisional, al día siguiente el actor se notificó en el expediente 293/2020-2A. A 10 días de dictada la orden judicial, el Presidente de la República, ha hecho caso omiso a la resolución, no ha reasignado el presupuesto ni ha ordenado la protección de las fuentes de empleo; tampoco ha ordenado facilidades para el pago de los impuestos; en cambio, violentado las normas laborales, López Obrador ordenó reducir el salario a empleados de la burocracia federal y quitarles el aguinaldo, para paliar los daños, para recuperar, dijo, aproximadamente 3 mil millones de pesos, dinero insuficiente, además de ser de procedencia ilícita, que dedica a la compra de insumos hospitalarios, al menos eso argumentó.

Andrés Manuel López, se niega a reorientar el presupuesto de sus obras y los millones de pesos para jóvenes construyendo el futuro. Trata de engañar a la autoridad judicial, por ejemplo, al adelantar a los adultos mayores la pensión por 4 meses, así se gasta el dinero y dirá que ya no lo tiene, manera burda de burlar el cumplimiento de la suspensión, lo que también debe sancionar la autoridad, la misma Ley de Amparo, lo prevé, cuando la autoridad responsable utiliza subterfugios para incumplir. El Presidente tergiversa el sentido y justifica que no rescatará empresas; eso no fue lo que ordenó el Juez, la autoridad judicial razona que el apoyo es para proteger las fuentes de empleo y los salarios de los trabajadores, objetivos diametralmente distintos; es más, López puede dar el dinero en mano a los trabajadores, como es de agrado para conseguir adeptos a su causa política. No paso por alto que el Presidente está acostumbrado a violentar las sentencias de amparo; una de ellas fue regresar los apoyos a las Estancias Infantiles; López no lo hizo. Ya antes cometió desacato cuando fue Jefe de Gobierno del DF, incumplió con sentencias de amparo. Sabe que no le pasa nada si las incumple, menos ahora que él es titular del Poder Ejecutivo, autoridad a la que acuden los jueces, magistrados y Ministros, para ejecutar por la fuerza las sentencias cuando no se cumplen y si es el mismo Presidente el que las incumple, él no se ejecutará voluntariamente; aquí la ley es omisa, no hay otra manera de cumplir una sentencia de amparo.

En síntesis, la suspensión provisional concedida por el Juez, José Rivas González, es y será histórica. Seguramente el Presidente estará presionando a los superiores del Juez, para que en revisión sea revocada, tal como sucedió con las obras del aeropuerto; todas las suspensiones habían sido ganadas en contra del Poder Ejecutivo. Pero, la vana justificación de tratarse de obras de “seguridad nacional”, fue más que suficiente para revocar las suspensiones y ordenar la continuación de las obras. Debieran aprovechar que López no puede impugnar, las autoridades están en cuarentena. Así de “marrullero” es el Presidente, utiliza el Supremo Poder Público, para poder hacer lo que le place. Hay testigos de las presiones que ejerce un grupo de “gestores”, del Presidente, que acuden con las autoridades para presionar y conseguir sus perversos objetivos, ganar los juicios con “chicanadas”. Por lo pronto, ha quedado en claro que es mucho más importante para la justicia federal -protegiendo los derechos humanos- la conservación de los empleos, el pago de salario a los trabajadores, en contraparte a pagar los intereses del fisco y ejecutar las obras caprichosas del Presidente, así como mantener a jóvenes construyendo el futuro, quienes no tienen base, están en proceso de capacitación. Se está en espera de la reasignación del miles de millones de pesos para que deje el Presidente de andar buscando dinero ilegal; -o promocionando rifas para recaudar dinero-, dijo el Juez, que el presupuesto no es inflexible, más bien es flexible en su asignación, tal y como lo hace el mismo Presidente. Le dieron al Titular del Poder Ejecutivo 48 horas para cumplir y no lo ha hecho; con la salvedad que la audiencia incidenteal queda reservada para cuando se reanuden las labores con motivo del acuerdo 4/2020, dictado por el Pleno del Consejo de la Judicatura Federal ¡En exceso han transcurrido las 48 horas y López Obrador no ha cumplido con la orden judicial!

 Héctor Parra Rodríguez

Periódico Raíces