Las razones de Pancho
Por la precisión del gobernador en su personal defensa; por la decencia política con la que inició para con AMLO…
Por Andrés González Querétaro Qro. 20 de agosto de 2020.
Desde Querétaro, tierra de libertades, la “mañanera” del presidente Andrés Manuel López Obrador – y de Francisco Domínguez Servién – no tuvo desperdicio noticioso alguno.
Por la precisión del gobernador en su personal defensa; por la decencia política con la que inició para con AMLO y por las punzantes expresiones para Emilio “L” por los videos del lunes.
“Le digo al señor presidente, que cuenta conmigo en esa coordinación en el estado”.
Habría también buenas noticias en obras por concluir – el nuevo hospital – ; otras con posibilidades para abrirse, el tren Querétaro, Guanajuato o San Luis, con participación probable de la iniciativa privada, no inmediato, sino a largo plazo y las de seguridad que diera a conocer el titular de la SEDENA, de favorables resultados por los tiempos, pero no del todo suficientes. Llamaron también la atención el amplio comentario que hiciera el presidente sobre la democracia y su personal compromiso por hacerla vigente. Vamos a ver.
Pancho apareció en pantalla serio, pero no enojado.
Y va dosificando su decir:
“Querétaro es uno de los siete estados mejor evaluados en todos los temas de seguridad…en los que, en todos los rubros vamos hacia la baja”.
Y le entra al tema de los videos, cómo no.
“Tema que, para mí, es personal y central. En mi vida siempre he dado la cara y hoy no será la excepción”.
Pancho endurece el gesto, las palabras:
“Los gobernantes tenemos la obligación de enfrentar los hechos, más cuando se trata de calumnias, de infamias, de ataques centrados en cuestiones políticas. El señor Emilio Lozoya ha pretendido involucrarme con una bajeza inaudita, en actos de corrupción”.
AMLO no le quita la vista al queretano; se la fija y, con la vista, parece querer fulminarlo. Esa foto se hace viral, por la expresión de molestia, coraje o tal vez odio del presidente. Odio de presidente, cuidado. Aunque, le diré, cuando las personas llegamos a viejos, ya no se tienen buenas caras. Un maestro de la escuela de periodismo nos decía que “después de los sesenta años, cada quién es culpable de la cara que tiene”. Le doy toda la razón.
Pero Pancho seguía, en referencia directa a Emilio Lozoya:
“Ha aportado solo sus dichos, que valen lo que su prestigio…nada”.
Y hace referencia precisa a los ahora famosos videos, a la decisión que tomó para remover a quién, por muchos años, fuera su secretario particular. “Y di parte a las instancias correspondientes para que él apele a su derecho que le convenga”.
Y en in intervención, en la que se llevó solo un poco más de ocho minutos, aclara:
“Por mi parte, no tengo nada que temer ni nada de qué avergonzarme y nada que ocultar”.
Y por si quedaba una duda, se lo repite a Lozoya:
“Lo dicho por el señor Lozoya, son infamias”.
Y se explaya:
“Nadie puede comprar lo que ya tiene. Desde que fui diputado federal, con respeto apoyé la reforma energética en el 2008, propuesta por el Partido Acción Nacional. La seguí apoyando como senador de la república y la presenté personalmente a nombre de mi partido…no había necesidad de darme dinero para obtener un voto que ya se tenía por convicción personal. Además, lo reitero, lo he dicho en mi vida política, su servidor – voltea a ver al presidente – no vive de la política”.
Y puntualiza las reservas y modificaciones que hizo a esa reforma, las 807 que permitieron quitarle prebendas al Consejo de Administración de PEMEX y el control de privilegios al sindicato petrolero. “Eso detonó amenazas contra mi vida. Si fuera cierta la calumnia, no habría propuesto la creación de un fondo petrolero o reconocer etiquetados para asegurar la transparencia y evitar el saqueo que después se dio”.
AMLO no cambió – en el tiempo que hablaba Pancho – su expresión.
En tanto, Pancho afina puntería, repite y suelta:
“No se puede creer en las palabras de un delincuente confeso. Yo doy la cara aquí y ante la autoridad. No busco la protección a cambio de inventar falsedades”
Y va al fondo del asunto cuando dice:
“Hay una intención política. Esta no es cuestión legal. Ataca a un gobernador de oposición bien calificado. Miente porque Querétaro, no tiene una, una sola observación de la Auditoria Superior de la federación ni de la Secretaría de la Función Pública Federal. Ni una. Y ese es el manejo del dinero público de todos los queretanos…con deuda cero…empleo, buenos salarios y ejemplo de crecimiento y – resumía – somos gente de trabajo, de esfuerzo y de palabra, por eso nos atacan”.
A esto, cuando Andrés Manuel López Obrador tomó el micrófono, no tuvo observación alguna.
Y Pancho cierra con esto:
“Además, en diez meses habrá elección. Doy la cara y defenderé mi nombre…este será el único posicionamiento público que daré a este respecto”.
La “mañanera” duró en total 106 minutos, – incluida la amplia exposición sobre seguridad del Gral. Luis Cresencio Sandoval sobre seguridad en Querétaro – y de los cuales el caso Querétaro en esta “mañanera” se llevó más de 80 minutos.
Cuando concluyó Pancho, se dio un intento de preguntas para el gobernador queretano que AMLO atajó. Nadie insistió.
De este caso y en otras instancias, seguramente falta mucho por hacer, investigar o decir, pero el primer aplanado, el político, ya se cubrió.